Aquí el servicio fue genial, en serio. La habitación tenía de todo: una caja fuerte para tus cosas, un escritorio para trabajar y ¡hasta un sofá cama! 🌟

Lo que más nos ha gustado es el personal del hotel.

Las camas son muy duras y las almohadas escasas.

la cama era genial, la habitación lo suficientemente espaciosa y nueva, con 2 camas dobles. un desayuno generoso y refinado con carne y huevos duros y también queso y un servicio eficiente.

El hotel era perfecto para nuestro grupo. Disfrutamos de la ubicación tranquila y la vista impresionante al lago y las montañas desde nuestra habitación. El desayuno era delicioso y abundante. Además, el hotel tenía un jardín y un parque donde pasamos tiempo jugando y divirtiéndonos. ¡Fue genial!

La única cosa que mejoraría para hacerlo aún más divertido para jóvenes como nosotros sería tener una discoteca o un bar animado en el hotel. Hubiéramos disfrutado de la oportunidad de divertirnos y bailar sin tener que salir del hotel.

la belleza de alrededor

en general , los precios en Suiza son muy caros

Es un hotel familiar donde prima la atención al cliente. El trato del personal es excelente (por cierto, hablan español perfectamente). El desayuno era abundante. Fácil acceso y aparcamiento para clientes.

Las habitaciones no han sido reformadas (a diferencia de los baños y otras instalaciones del hotel). En cualquier caso, son muy cómodas pero no les vendría mal una puesta a punto.

Pasamos unos días inolvidables. Un alojamiento impecable y perfecto con una ubicación muy buena, la mejor, lo suficientemente cerca de una estación de autobuses, del centro de la ciudad y también de la orilla del lago. Una comida increíble para un desayuno generoso con mermelada casera. Las habitaciones con 2 camas dobles y con un patio. ¡Servicios eficientes! La piscina muy bonita.

Una ubicación perfecta y fantástica en las inmediaciones de una parada de autobus y de un restaurante y hay un parking gratis. El distrito Meggen merece atención. Habitación moderna que cuenta con un balcón, 2 camas dobles y también un patio. Desayuno refinado con buenos productos, me ha encantado todo.

El cuarto de baño es enano.

Las vistas al lago

No hay ascensor pero como solo hay 2 pisos, no se nota tanto.

El hotel Balm está ubicado en un entorno precioso, con vistas espectaculares desde el balcón de nuestra habitación. Está a solo 10 minutos en autobús del centro de la ciudad, con la parada justo en la puerta del hotel. Además, nos proporcionaron un bono gratuito para utilizar el transporte público, por lo que pudimos dejar nuestro coche en el parking sin coste adicional. El desayuno era excelente y el personal del hotel era muy amable y atento. La habitación estaba muy limpia y cómoda, con un espacioso baño y todas las comodidades necesarias. había hermosos senderos en el parque trasero del hotel para disfrutar de agradables paseos.

Nada malo 👍

Ha sido una estancia magnífica de 3 noches. Hotel muy limpio. Ubicación en las inmediaciones de la orilla del lago, del centro de la ciudad y de una parada de autobús. Cerca del Piuskirche. Habitación soleada y maravillosa. Instalaciones excelentes.

La limpieza, confort, tranquilidad, y la amabilidad del personal. Nos sentimos muy agusto. La parada del bus está en la misma puerta.

El que tengas que pedir las claves del wifi cada día. Y que el desayuno es genial, pero un poco monotono, es un buffet variado, pero no cambian ningun dia de surtido.

El hotel se encuentra en un edificio impecable con una decoración bonita. La vista desde el balcón al lago es muy relajante. La ubicación es cómoda e ideal, justo delante de la parada de autobús. La proximidad a varias actividades, al centro y a restaurantes es realmente conveniente.

La tranquilidad del pueblo, la belleza del paisaje, lo cerca que está de Lucerna. Lo amables que son los empleados del hotel.

Wifi gratis, desayuno muy bueno con una terraza con vistas.

La habitación un poco pequeña para 4personas